Del esplendor a la penumbra
La quiebra del antiguo centro comercial, ubicado en la entrada norte de la ciudad de Rancagua, ha sido considerada uno de los fracasos comerciales más grandes del país. Se ha especulado sobre muchos proyectos, pero ninguno se ha llevado a cabo hasta el momento.
Fue el panorama más entretenido para los rancagüinos durante los años 90. No había fin de semana que el shopping no estuviera lleno de gente, niños con globos celebrando sus cumpleaños, juegos inflables instalados en la entrada que se llenaban de pequeños, felices con su bebida en mano, junto a sus padres que aprovechaban de “vitrinear” en una serie de tiendas de diversos tipos, incluyendo puestos de artesanía.
Fue así durante muchos años. A pesar de que el lugar se encuentra muy alejado del centro de la urbe, el estacionamiento siempre se podía ver lleno. Además que, aledaño al terreno funcionaba un supermercado Unimarc, primera cadena nacional en la ciudad. Esto era una muy buena alternativa para los vecinos del sector, que se encontraban tan alejados de éstos locales, casi todos muy centrales.
Así, el sector norte de Rancagua constituía una gran atracción comercial, siendo el Shopping Punta del Sol el primer Mall de la capital regional.
La superficie total del recinto corresponde, según datos municipales, a 75.837 metros cuadrados. El primer piso fue entregado en 1994, su construcción estuvo a cargo de empresarios de automotoras locales, Mario Anfruns y Hernán Hermann, quienes habrían invertido cerca de 6 millones de dólares en el terreno.
El comienzo del fin
Sin embargo, la ciudad fue cambiando con los años. Comenzó a crecer en distintos aspectos sociales, y uno de los que más se notó fue el comercio. La creación del Mall del Centro, ubicado en pleno corazón de la ciudad, acabó con todo el comercio minoritario, y el Shopping no fue la excepción. Así las cosas, el concurrido y exitoso centro comercial se declaró en quiebra en el año 1999.
De a poco el lugar comenzó a despoblarse, ya que en ese tiempo eran muy pocas casas construidas a los alrededores, comparado a la actualidad. Se fue convirtiendo en un terreno vacío y abandonado, con los vidrios quebrados, el pasto largo y seco, totalmente descuidado. Más tarde, fue enrejado entero con candados y cadenas, debido a que ingresaban skaters al terreno y provocaban desórdenes, además de beber alcohol y consumir drogas.
Sus variados postores y diversos proyectos
Con el tiempo, y producto del inevitable fracaso económico del que el lugar fue víctima, en 1999 el Banco Estado se apropió del terreno, comenzando los debidos trámites para efectuar un remate. Pero finalmente la empresa de Bodegajes Técnicos (BODETEK), propiedad de Jimmy Chadwick, los hermanos Dittborn -entre otros empresarios-, adquirieron el lugar en el año 2003 de parte del Banco en 600 mil 200 UF.
El arquitecto y director de Obras Municipales de Rancagua, Patricio Letelier Elgueta, comenta que “el ex Shopping es un recinto privado, por lo que no se puede hacer nada ahí”. Al prestar estas declaraciones, se refiere al proyecto más actual que se está evaluando para la zona. La sede de la Universidad Tecnológica de Chile, Inacap, pretende instalar su edificio institucional en el terreno, aunque la decisión recién estaría tomada el próximo año.
Letelier comenta que la conectividad es el problema. “El gran inconveniente de las instalaciones es que tienen poca accesibilidad, ya que se encuentran frente a la carretera 5 Sur. Por el otro sector hay bastantes casas particulares, pero sus habitantes serían los únicos que tienen fácil acceso al lugar. Es imperioso mejorar el nudo vial de la zona”.
Por esta razón, la idea de Inacap se encuentra en duda, debido a que estarían evaluando algo más céntrico.
El administrador de Bodetek, Gabriel Lagos, afirma que cuando compraron el recinto la idea era instalar bodegas para su empresa. “Lo vimos de lejos, pero cuando lo evaluamos en profundidad nos dimos cuenta que era un lugar demasiado bueno como para instalar bodegas”. Por esta razón, los dueños de la propiedad no han llevado a cabo ningún proyecto, hasta el momento.
Cuando empezaron las licitaciones para abrir casinos de juegos en la región, muchos puntos de Rancagua fueron captados por variadas empresas, locales y extranjeras. La sociedad norteamericana Thunderbird mostró su interés por el terreno de la ex Punta del Sol.
“Cuando comenzó el proceso de licitación, los representantes de Thunderbird conversaron con nosotros, nos dijeron que si se la adjudicaban nos comprarían el lugar. Después ellos invirtieron y solicitaron dividir el terreno, porque querían utilizar sólo una parte”.
Finalmente todo quedó en nada. La empresa Bodetek no pudo vender la propiedad debido a su elevado costo. Así que, para hacer la venta un poco más atractiva y con autorización del MOP y Vialidad, instalaron semáforos en la carretera aledaña, para “dar mayor conectividad y valor agregado” dice Lagos, y además, pavimentaron gran parte del sector con dineros propios de la empresa.
Hasta la fecha, la compañía no ha recibido ninguna oferta de privados, ni del sector público. Sólo se puede divisar al transitar por el sector, el enorme cartel que ofrece la venta del lugar en un precio estimado de 163 mil UF, y un arriendo mensual de 1600 UF. Al costado se encuentra un sitio eriazo, que también pertenece a Bodetek.
Un lugar que realmente se extraña
La señora María Rosa Echenique reside en las casas que se encuentran casi al lado del ex Shopping. Cuenta que le encantaba ir con sus hijos los fines de semana a pasar una tarde agradable. “La hora se me pasaba volando, entraba de día y salía de noche”, relata. Opina que era un centro comercial que lo tenía todo, hasta un supermercado. “Era casi como vivir en el centro”, dice.
La quiebra del lugar la sorprendió mucho, como a todos los habitantes de Rancagua. “Ya sabíamos que se estaba construyendo el Mall del Centro, pero estaba demasiado lejos.
Personalmente me dio una gran tristeza que este lugar que fue tan lindo y entretenido se haya acabado de un día para otro. Lo recuerdo con mucha nostalgia”, afirma.
Después de muchos esfuerzos de parte de sus dueños, de especulaciones en cuanto a los proyectos que se harán, y años de espera, el ex Punta del Sol sigue abandonado, no hay nadie
que lo cuide, aunque se ha mantenido cerrado por todo este tiempo.
Los habitantes de la ciudad de seguro se encuentran expectantes, para algún día saber qué harán con las dependencias del ex centro comercial más entretenido, atractivo y exitoso que ha habido en Rancagua. Por ahora, sólo se limita a ser una parada de buses provenientes de Santiago y pueblos aledaños. “¿Dónde baja?”, “En el Shopping”.
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